El café especial es mucho más que una bebida: es el resultado de un proceso meticuloso desde el grano hasta tu taza. En Café Divino, cuidamos cada etapa para ofrecer un café excepcional. Recolectamos solo cerezas maduras, las lavamos y secamos al sol en marquesinas, y luego las almacenamos en condiciones óptimas antes de la trilla.
Este proceso artesanal garantiza que el Café Divino Primordial conserve sus notas achocolatadas y a nuez. Un tueste medio y una cata rigurosa aseguran que cada lote mantenga la consistencia que tanto valoran quienes disfrutan varias tazas al día, especialmente en oficinas o espacios de concentración.
Tomar Café Divino es elegir calidad, sabor y origen. Cada taza de nuestro Café Divino Primordial es una experiencia única que conecta con lo natural, lo bien hecho y lo verdaderamente delicioso.